
Ha pasado de ser una fruta considerada “venenosa” a su llegada a Europa a ocupar los primeros puestos de su consumo en el ranking mundial.
Los tomates son uno de los productos frescos indispensables en la mayoría de las casas. La variedad de formas de consumirlo lo hace muy versátil y atractivo para todas las edades.
Aunque no lo creas el tomate es, botánicamente, una fruta. Sin embargo, fue la Corte Suprema de los Estados Unidos la que dictaminó que es una hortaliza o verdura, a raíz de un litigio que mantuvo un importador en 1881.
Hoy en día, tras la papa es la fruta o verdura que más se produce en el mundo. Casi 180 millones de toneladas en el año 2018, según datos de la FAO.
Pero aquí nos vamos a centrar en las propiedades del tomate canario, probablemente las islas, el primer lugar al que arribó después de zarpar del continente sudamericano.
Un poco de historia del tomate canario.
A pesar de no haber referencias que constaten la fecha de la llegada del tomate a Canarias, muchos estudios sugieren que fue el primer territorio europeo al que arribó a finales del siglo XVI.
La primera referencia documental del tomate canario es de 1865 en una revista editada en París. En dicho documento ya se recogen las bondades de su cultivo y las excelentes características del tomate canario.
Es el sol de Canarias el que permite madurar al tomate canario de manera natural, sin alterar artificialmente su composición.
Pero fue en 1885 cuando su cultivo despegó de la mano de los Ingleses. Los buques de las compañías que suministraban carbón a las colonias británicas en el oeste de Africa, regresaban vacíos al Reino Unido.
Así que aprovechando el espacio vacío de los barcos y el clima de las islas que permite su producción en invierno, hizo que un empresario británico iniciara el cultivo para la exportación.
Fue tal el éxito de la iniciativa que en pocas décadas el tomate canario, canary tomato o kanarische tomaten, llegaba a más de treinta puertos europeos, desde donde se distribuía a casi todo el continente.
Propiedades del tomate canario.
El tomate canario se caracteriza por ser redondo, liso y de un calibre que oscila entre los 40 y los 57 mm. Lo que hace único al tomate canario es el territorio en el que se cultiva. Las Islas Canarias gozan de un clima extraordinario durante casi todo el año.
Además de las suaves temperaturas fruto de los vientos Alisios, dispone de la mayor cantidad de horas de sol de toda Europa. Es este sol el que permite madurar al tomate canario de manera natural, sin alterar artificialmente su composición.
A pesar de su tamaño, el tomate canario concentra las siguientes propiedades:
- Es Fuente de vitaminas y minerales: aporta alrededor del 40% del requerimiento diario de vitamina C. También contiene vitamina A y abundante potasio, así como hierro.
- Mejora la circulación sanguínea: contiene vitamina K que ayuda a controlar la coagulación. De esta manera, el tomate canario ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares.
- Reduce los riesgos de accidente vascular cerebral y disminuye los efectos del envejecimiento sobre las funciones cerebrales, protegiendo el corazón y ayudando a reducir el colesterol.
- Es un buen regulador del tránsito intestinal.
- Protege la piel de los rayos ultravioletas. El tomate canario ayuda en el mantenimiento de unos dientes sanos, huesos, pelo y piel. La aplicación tópica de jugo de tomate se utiliza para curar quemaduras. El consumo diario de tomate protege la piel contra los rayos UV.
- Protege la vista. La vitamina A mejora nuestra visión, ayuda a proteger nuestros ojos de enfermedades degenerativas o ceguera nocturna.
- Es Diurético. El tomate canario contiene potasio y bajos niveles de sodio, esto favorece a evitar la retención de líquidos y a la eliminación de toxinas.
- Previene las infecciones del tracto urinario: la ingesta de tomate canario también reduce la incidencia de infecciones del tracto urinario, así como el cáncer de vejiga.
- Previene los cálculos biliares: el consumo regular de tomate también ayuda a disolver los cálculos biliares
Valor nutricional.
Por 100 gramos de peso fresco:
- Agua (g) 94
- Fibra (g) 1,4
- Calcio (mg) 11
- Hierro (mg) 0,6
- Magnesio (mg) 10
- Zinc (mg) 0,22
- Potasio (mg) 290
- Fósforo (mg) 27
- Vit. B6 (mg) 0,11
- Vitamina C (mg) 26
- Vitamina E (mg) 1,2
- Fructosa (mg) 18
El tomate canario, rico en antioxidantes naturales.
Su color rojo intenso se debe al alto contenido de licopeno, un antioxidante que ayuda a prevenir el cáncer provocado por lo radicales libres.
El licopeno en el tomate previene la oxidación de lípidos séricos, ejerciendo así un efecto protector contra las enfermedades cardiovasculares.
Las temperaturas que oscilan entre los 18ºC y los 22ºC permiten alcanzar unos niveles superiores de licopeno al tomate canario.
Aliado contra el cáncer.
Los científicos descubren constantemente nuevas propiedades beneficiosas que aporta el tomate para la salud. Muchas de ellas aún se están fraguando, otras están totalmente confirmadas.
Entre estos estudios se ha descubierto, a rasgos generales, que el tomate protege la próstata y estimula las defensas. En este sentido, se persigue la constatación de que, en el caso de la próstata, contribuya a reducir la posibilidad de cáncer; al igual que de otros tipos como de pulmón o tracto digestivo y de cuya confirmación solo parece cuestión de tiempo.
Un reciente estudio de la Universidad de Almería ha concluido que los digestatos de sopa fría de tomate (gazpacho), reducen el crecimiento de células de cáncer de colon in vitro.
Todo el año.
Y la buena noticia, además de lo relatado hasta aquí, es que el tomate canario se cultiva durante todo el año y lo puedes encontrar en cualquier momento.
Eso sí, asegúrate que sea tomate canario, origen Canarias y no el tomate tipo canario, producido en otras zonas y que algunos lo pasan como canario de origen.
¡Salud!